El expresidente peruano Alberto Fujimori retornó a la prisión, donde cumple una condena de 25 años por abusos a los derechos humanos, después de ser atendido ayer en una clínica por una crisis hipertensiva, informó hoy su médico y exlegislador Alejandro Aguinaga.
El exmandatario, de 78 años, regresó ayer por la noche a su celda en la sede de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía Nacional, después de haber sido trasladado de emergencia, horas antes, a la clínica Centenario en el distrito de Pueblo Libre.
Aguinaga declaró a radio Exitosa que Fujimori retornó a la prisión con la condición de que el jueves próximo se coloque un monitor en su celda para que registre su frecuencia cardíaca durante 24 horas. Efe
“Luego se tiene que sacar el informe que da este monitor para poder evaluar en qué momento hace arritmias y qué es lo que podría estar condicionando esta situación”, explicó el galeno.
El traslado de Fujimori a la clínica se conoció ayer mientras miles de personas marchaban por las calles del centro histórico de Lima contra la posibilidad de que el exmandatario sea indultado por el presidente, Pedro Pablo Kuczynski.
Kuczynski declaró ayer que los médicos evaluarán el estado de salud de Fujimori para determinar si debe otorgarle un “perdón médico” a su condena, aunque aseguró que no se tratará de un indulto.
“Eso está exclusivamente determinado por la opinión de médicos de primer nivel que verán cuál es el estado de salud del expresidente Fujimori“, declaró el mandatario a RPP Noticias.
El jefe de Estado agregó que antes de fin de año se podrá “definir esto con opiniones profesionales”, pero remarcó que si no hay condiciones para una excarcelación “se seguirá la recomendación médica”.
La hija del exmandatario Keiko Fujimori le exigió en junio pasado a Kuczynski, en Twitter, que “haga uso de su potestad de presidente” y que indulte a su padre, pues en su opinión “llegó la hora de actuar”.
Su hermano y congresista Kenji Fujimori también pidió ayer la libertad de su padre para “ahorita”.