En 10 años se descubrió casi 20% de fauna anfibia de Uruguay, según experto

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En una década se ha descubierto casi el 20 % de la fauna anfibia de Uruguay, destacó a Efe el zoólogo Raúl Maneyro, al detallar que se trata de “tres especies nuevas para la ciencia y casi media decena de especies nuevas para el país”.

En Uruguay hay alrededor de 40 especies de anfibios, según el experto, cuyo descubrimiento de la lagartija Liolaemus gardeli fue publicado por la revista científica neozelandesa Zootaxa en julio pasado.

“Nosotros entre el año 2002 y 2012 descubrimos tres especies nuevas para la ciencia y casi media decena de especies nuevas” para el país, declaró el investigador de la Universidad de la República de Uruguay.

Sobre esos datos, Maneyro matizó que cabe la posibilidad de que “siempre hubiesen estado allí”.

De acuerdo con el uruguayo, que en total ha descubierto cuatro especies, tres en su país natal y una en Brasil, este aumento de hallazgos está relacionado con “el aumento de la profesión del trabajo de campo”.

Así como con el cambio climático, el cual, de acuerdo con el especialista, está “contribuyendo en que poblaciones (de anfibios y reptiles) que eran muy pequeñas y difíciles de detectar crezcan conforme aumenta la temperatura”.

Maneyro también explicó que en el país austral “se ve una tropicalización de los ambientes, ya sea en un aumento de lluvia o de temperatura”.

“Eso va a favorecer a la diversidad de anfibios”, por consecuente, esto hace que algunas especies sean más fáciles de ver.

Mientras que, este mismo aspecto climático hará que “otros ejemplares empiecen a ser más difíciles (de ver)”, como es el caso de las variedades que se encuentran en zona costera sur del país que serán “negativamente afectadas”.

Con respecto a su último descubrimiento, el zoólogo destacó que el hallazgo se dio junto a su colega la uruguaya Laura Verrastro en un arenal de la zona de Tacuarembó, en el norte Uruguay, una zona que es “bastante inexplorada”.

Además, el también profesor describió el primer encuentro con la especie como “un hecho muy fortuito”, ya que esta especie tiene “distribuciones geográficas muy pequeñas”, que abarcan “unos pocos kilómetros cuadrados”.

Esta pequeña lagartija de color similar a la arena fue bautizada Liolaemus gardeli en honor al cantante, compositor y actor Carlos Gardel, ya que existe la teoría de que esta mítica figura del tango nació en esta región uruguaya.

“Me pareció una cosa interesante y linda. Además, este nombre podría beneficiar a la preservación del ambiente y de la especie por el hecho de tener una identidad asociada a un departamento (provincia) y a lo cultural”, afirmó el especialista.

Sobre este tema, Maneyro explicó que desde la primera vez que vio a la lagartija supo que iba a ser una especie amenazada debido a su pequeña “distribución geográfica”.

Los otros anfibios que el científico descubrió son: el sapo Rhinella achavali, llamado así en homenaje al biólogo e investigador uruguayo Federico Achaval; el sapito Melanophryniscus admirabilis, que destaca por su color rojo y verde y fue descubierto en el sureño estado brasileño de Río Grande do Su; y el sapito Melanophryniscus langonei, reseña Efe.

Por último, hizo hincapié en que “estos descubrimientos, ya sean nuevos para la ciencia en general o solo para el Uruguay, son importantes a la hora de establecer pautas de legislación de manejo de los ambientes”.