“Marca goles que vemos solo en los dibujos animados, como en ‘Oliver y Benji'”. El italiano Marco Verratti condensa así el sentir de colegas y rivales acerca del rendimiento del brasileño Neymar, estrella del París Saint-Germain (PSG).
A las declaraciones de admiración de su compañero, difundidas por el PSG, se han unido también las de contrincantes y antiguos jugadores.
Y no es para menos. “Ney”, que ostenta el título de futbolista más caro del mundo, firmó anoche ante el Toulouse una memorable velada, coronada con dos asistencias, un penalti provocado y dos tantos, el último de bandera.
“Admiro a Neymar. Su actitud es excepcional. Es tranquilo y rápido. Es muy bueno para el fútbol”, opinó el entrenador del Toulouse, el equipo goleado anoche, Pascal Dupraz.
Del 6-2 que su equipo encajó, el mago brasileño tuvo mucha culpa. Abrió su cuenta en el ecuador del primer periodo -significaba el empate a un gol- y lo cerró en el descuento con una diana en la que emuló a las retratadas en la popular serie japonesa, conocida en América Latina como “Súper Campeones”.
Rodeado por hasta cinco defensores, Neymar caracoleó hasta que encontró un espacio para definir ante el meta Lafont.
Fue el tercer gol del brasileño en dos partidos con el PSG. En su debut de hace una semana, ya se había estrenado en el triunfo liguero ante el Guingamp (0-3), en el que además dio una asistencia.
“Nunca he visto a un jugador así. Y eso que jugué contra Maradona. Hace las cosas a una velocidad increíble”, dijo en declaraciones publicadas hoy en “L’Équipe” el exinternacional francés Yannick Stopyra, autor de once goles con la selección en los años 80.
El habilidoso delantero, por que el PSG pagó 222 millones de euros al Barcelona, se movió anoche con bastante libertad, aunque más escorado a la izquierda.
En su estreno ante su afición en el Parque de los Príncipes, sus socios principales fueron el medio francés Adrien Rabiot, el lateral zurdo Larvin Kurzawa y el argentino Ángel di María, con los que intercambió 16, 11 y 11 pases, respectivamente.