Un nuevo ataque se registró en las tuberías del acueducto Doña Ana, la cual permite que más de mil habitantes del corregimiento La Cruzada de Remedios tenga el servicio de agua.
La compañía propietaria, rechazó el acto violento y además lamentó que busquen entorpecer los acuerdos entre el Gobierno y los líderes mineros para levantar el paro que llevaba más de un mes.
En el momento las autoridades y la empresa canadiense evalúan las afectaciones en el acueducto tras el atentado que se presentó en la noche del miércoles.
Tras siete horas de reunión, los líderes de los municipios de Segovia y Remedios lograron llegar a un acuerdo de 15 puntos.