La riqueza de los recursos energéticos con los que cuenta América Latina y la capacidad tecnológica de China para impulsar su aprovechamiento y promover su desarrollo centraron la tercera sesión plenaria de la cumbre China-LAC.
“Energías limpias, renovables y ciudades sustentables” fue el título de la tercera sesión paralela de la cumbre China-LAC, en la que participó la ministra de Industria de Uruguay, Carolina Cosse, así como empresarios y la española Gema Sacristán, directora general de Negocios de la Corporación Interamericana de Inversiones (CII).
Los ejecutivos de diferentes compañías, por su parte, expusieron sus experiencias y sus casos de éxito en proyectos vinculados a la tecnología, la innovación y el desarrollo sustentable.
“La política llevada adelante (en Uruguay) en materia de energía ha sido exitosa y tiene aún grandes cosas por delante. En América Latina también, toda la región tiene un enorme potencial en lo que respecta a las energías renovables”, remarcó la ministra Cosse.
La ingeniera de profesión agregó que “Latinoamérica tiene todo para ganar en lo que se refiere a energías renovables”.
El país suramericano impulsó en los últimos años el cambio en su matriz energética y el año pasado la energía eléctrica proveniente de fuentes renovables alcanzo el 98 %.
China, por su parte, también ha experimentado en el último tiempo un cambio hacia las fuentes de energía renovables, informa Efe.
Dong Bin, presidente de China Energy Engineering Corporation Limited, explicó durante su alocución que el gigante asiático “ha recorrido un camino tortuoso en el desarrollo del sector energético”.
“Durante mucho tiempo el desarrollo energético estuvo en un nivel bajo. Energías de origen fósil eran el grueso de la estructura energética”, señaló el ejecutivo.