Grupos disidentes de la ya desmovilizada guerrilla de las Farc son actores clave en las redes del narcotráfico y el crimen organizado surgidas tras el acuerdo de paz con el Gobierno, según un informe difundido por el centro de investigación InSight Crime.
“Las disidencias de las Farc que tenían vínculos con diferentes facetas del narcotráfico sencillamente han continuado haciendo lo que venían haciendo (…) Simplemente no soltaron el control sobre esas actividades”, explicó en rueda de prensa la profesora de la Universidad del Rosario e investigadora del Observatorio de Crimen Organizado Arlene Tickner.
La investigación de InSight Crime, presentada hoy en Bogotá, concluye que estos grupos, autodenominados Bloque Oriental, “cuentan con unos 1.000 o 1.500 combatientes y milicianos” y “actualmente manejan gran parte del mercado de la coca en seis departamentos, las principales rutas hacia Brasil y Venezuela”.
El estudio explica que los grupos disidentes surgieron principalmente del Frente 1 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, quienes votaron a favor de retirarse del proceso de paz, liderados por Néstor Gregorio Fernández, alias “Iván Mordisco”.
“Al menos 80 guerrilleros rasos apoyados por redes de milicias y colaboradores (…) se convirtieron en la primera unidad en declararse disidente”, detalla el texto.
El informe agrega que otros comandantes de la guerrilla se unieron tras la firma del acuerdo a esa primera facción, entre los cuales se encuentran Miguel Botache Santillana, alias “Gentil Duarte”, y Géner García Molina, alias “Jhon 40”, reporta Efe.
Tickner alertó que si el acuerdo de paz se implementa de manera “inadecuada”, cabe “la posibilidad de que algunos desmovilizados, al no encontrar ninguna salida vital, regresen a actividades armadas” y engrosen las filas de los ya existentes grupos de disidencias.
Por otra parte, la investigación también describe a grupos relacionados con las Farc que no llegaron a participar del proceso de paz como “Farcrim” o “Farc criminales”, “exintegrantes” o “elementos que estuvieron vinculados” con la guerrilla que “continuaron sus actividades criminales en áreas donde siempre habían operado”.