La colombiana Caterine Ibargüen, campeona olímpica y mundial; la venezolana Yulimar Rojas, subcampeona en Río 2016, y la kazaja Olga Rypakova, titular olímpica en Londres 2012, se declaran listas para afrontar el lunes la final de triple salto de los campeonatos del mundo.
En busca de su tercera corona mundial, Ibargüen considera que su medalla de oro olímpica en Brasil fue “la guinda del pastel”, pero advierte de que no ha perdido su apetito de títulos mundiales.
“Sin ninguna duda, voy por mi tercera victoria en Mundiales. Todavía tengo hambre de títulos y el de Londres puede ser uno de ellos”, comentó tras ganarse el puesto en la final con su primer salto, de 14,21.
Yulimar Rojas, adiestrada por el multicampeón mundial cubano Iván Pedroso en Guadalajara (España), sabe que tendrá que trabajar duro para ganar la final. “Pero voy a demostrar que soy capaz de hacerlo. Estoy un poco desconcertada por haber necesitado dos saltos (el segundo, de 14,52) para entrar en la final, pero también he preparado bien la parte psicológica de la competición”.
“Sueño cada día con ganar esta final. He fichado por el FC Barcelona y es lo mejor que he podido hacer, aunque aún sigo entrenando en Guadalajara. Llevo este cabello gris porque me hice la promesa de cambiármelo después de ganar la medalla de oro”, explicó.
Rypakova, campeona olímpica en este mismo estadio hace cinco años, estaba un poco preocupada por como llevaba la temporada, de ahí que le sorprendiera su clasificación con el primer salto, que resultó el más largo de toda la ronda (14,57)
“Es importante guardar energías para la final del lunes. He tenido problemas en la espalda y tuve que cambiar mi preparación así como reducir la carga de entrenamiento, sobre todo las pesas, pero parece que he podido con todos esos problemas”, explicó