El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, recibió un revés de la Corte de Constitucionalidad (CC) que resolvió dejar en “suspenso definitivo” su orden de expulsar al jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad (Cicig), el colombiano Iván Velásquez.
El amparo fue solicitado el pasado domingo por el titular de la Procuraduría de los Derechos Humanos, Jordán Rodas, después de que el presidente anunciara su decisión de declarar “non grato” y expulsar del país al comisionado, una postura que reiteró, tanto él como su Gobierno, en varias ocasiones.
La orden de Morales obedecía, según sus propios argumentos, a una supuesta “injerencia en asuntos internos” de Velásquez, y sostuvo que su acción se basó en el artículo 183, literal P, de la Constitución, que dice que el presidente tiene como función “recibir a los representantes diplomáticos, así como expedir y retirar el ‘exequatur’ a los cónsules”.
Pero la decisión de este martes de la Corte “impugna el acto del presidente” al entender que este “actúa con ilegalidad”, pues ese artículo no aplica y, además, “no cumplió con los preceptos constitucionales, específicamente el artículo 182 de la Constitución”, reseña Efe.
Otra de las razones con las que el Constitucional razonó rebatir el acto presidencial es el artículo 12 del Convenio de Creación de la Cicig, del año 2007, que indica que para pedir la salida del comisionado el Gobierno de Guatemala debe llegar a un acuerdo con Naciones Unidas.