La Justicia indígena condenó a 40 años de prisión al responsable del asesinato de un exintegrante de las FARC el pasado 25 de abril, informó la Fiscalía que investiga otros 9 casos.
Este caso se convirtió en el primero ocurrido desde que comenzó a ser implementado el acuerdo de paz entre esa guerrilla y el Gobierno Nacional.
“La sentencia fue impuesta por la Jurisdicción Especial Indígena, dentro de una investigación que contó con el apoyo de la Fiscalía”, indicó el ente acusador en un comunicado.
José Uberth Yatacué fue asesinado el pasado 25 de abril en el municipio de Toribio, en el departamento del Cauca, hecho por el que fue condenado Jhon Ramírez, alias “el Zarco”.
La Fiscalía señaló que Yatacué fue asesinado “cuando se disponía a visitar a su familia, luego de obtener un permiso para salir de la zona veredal”, donde los guerrilleros cumplen su proceso de tránsito a la vida civil.
El medio alternativo Pacifista informó en ese entonces que Yatacué fue abordado cerca del hospital de Toribío “por hombres encapuchados que le dispararon seis veces y huyeron”, y detalló que “tenía 35 años, era indígena y comandaba desde hace 18 las milicias (las redes de apoyo) en esa zona del país”.
La Fiscalía aseguró que también investiga nueve casos de homicidios de integrantes de las FARC, entre ellos el de Luis Ortiz, alias “Pepe”, amnistiado y exintegrante de la Columna Móvil Daniel Aldana, ocurrido en un caserío próximo al municipio de Tumaco, el pasado 16 de abril.
Por ese hecho, agregó la institución, ha sido acusado Hernán Pai Pascal, alias “Renol”, a quien se le dictó una orden de detención en establecimiento carcelario.
Además, el pasado 29 de abril, murió el desmovilizado de las FARC Aníbal Chocué Campo en un poblado próximo al municipio de Caldono, en el Cauca, en medio de un “intercambio de disparos”.
La investigación de la Fiscalía señala que Chocué “se encontraba atracando a comerciantes de café de la región con un fusil AK-47”.
También investigan el caso de un menor de edad exintegrante de la Columna Móvil Daniel Aldana, quien fue asesinado el pasado 23 de abril en la población de Tumaco (suroeste), “al parecer por negarse a incorporarse a la disidencia que se conformó en esa región”.
Otro de los casos es el de Rigobel Quesada García, exintegrante de la Columna Móvil Teófilo Forero, que murió el pasado 19 de junio, “dos meses después de ser amnistiado”, según la información.
Las indagaciones indican que “Quesada García llegó con un machete a una finca en (la localidad de) San Vicente del Caguán y cuando se disponía a agredir a su ex pareja sentimental se escuchó una detonación que acabó con su vida”, añadió la Fiscalía.
Mientras que Juan Fernando Amaya Valencia, alias “Amayita”, murió el pasado 12 de julio tras ser interceptado por dos sujetos que le dispararon cuando se movilizaba en una motocicleta en una zona cercana al municipio de Ituango (noroeste).
La Fiscalía confirmó además que en lo corrido del año han sido denunciados tres homicidios de integrantes de las FARC, “que a la fecha de sus muertes no estaba confirmada su pertenencia al proceso de paz”, reseña Efe.
Las víctimas fueron identificadas como José Luis Campo Bermúdez, alias “Ácido” o “Simón”, Eider Quitumbo Taquinas y Rulber Santana Parra.
