Con vísperas a las próximas elecciones presidenciales que se celebrarán el el año 2022, la Universidad del Rosario realizó un estudio para conocer la percepción de los jóvenes en esta contienda electoral.
En las próximas elecciones de 2022 para Presidencia, el 76% de 2517 jóvenes encuestados piensa votar. Sin embargo, el 67% no sabe aún por qué candidato lo haría y un 59% tampoco tiene claro quiénes son los candidatos a la jefatura del Estado.
Aunque el 60% de los jóvenes también piensa votar para Cámara de Representantes y el 62% para Senado, el 81% no sabe por quién hacerlo y en un 77% desconoce quiénes son los candidatos para el Legislativo.
Así lo indicó Alejandro Cheyne, rector de la Universidad del Rosario, al entregar los resultados de la encuesta El Presidente que quieren los jóvenes colombianos, análisis que indagó las percepciones de 2517 jóvenes entre 18 y 32 años en Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, Cúcuta, Bucaramanga, Pasto, Villavicencio, Manizales, Neiva y Tunja, quienes representan un universo de 4,7 millones de personas.
“El 78% de los jóvenes cree que votar es una forma de ayudar a transformar y solucionar los problemas del país y el 75% vota usualmente para que haya un cambio en Colombia. Vemos que las dos características más importantes de los jóvenes al decidir su voto son: el 48% considera que debe ser alguien con experiencia política y el 43% considera que debe ser alguien que sepa de economía. Sin embargo, vemos en el tercer lugar que los jóvenes quieren un perfil también que sepa de temas sociales con un 34%”, explicó Cheyne.
En la encuesta de la Universidad del Rosario, Cifras y Conceptos, la Hanns Seidel Stiftung y El Tiempo, los 2517 jóvenes indicaron que, teniendo en cuenta la coyuntura actual y pensando en las elecciones de 2022, votarían por un candidato de centro en un 21%, de izquierda en un 20%, de centro-izquierda en una 17%, de centro-derecha en un 15%, de derecha en un 12% y no van a votar en un 16%.
Manifestaron que a la hora de escoger por quien votar tienen en cuenta la propuesta del candidato (58%), el perfil del candidato (47%), la ideología del candidato (34%), las conversaciones de la familia (18%), el partido o movimiento del candidato (18%) y las conversaciones con los amigos (17%).
El estudio les consultó a los jóvenes sobre las emociones que les generan los políticos. Aunque a los encuestados les generan desagrado (38%), desilusión (33%), frustración (23%) y rabia (20%); las elecciones de 2022 les generan esperanza (33%), desilusión (22%), frustración (20%) e ilusión (20%).
En cuanto al voto digital, solo el 49% ha escuchado hablar del mismo. De estos, el 76% considera que facilitaría el proceso de votación.
Contexto y realidad de los jóvenes
Los jóvenes encuestados afirmaron que los principales problemas que más los afectan son la falta de empleo (54%), la inseguridad en las calles (52%), las demoras en la atención a salud (38%), los hechos de corrupción (36%), la desigualdad (34%), la pobreza (33%), la falta de acceso a la educación superior (28%), el incremento de la violencia (22%), los abusos por parte de la fuerza pública (20%), los actos vandálicos (20%) y los problemas medio ambientales (18%), entre otros aspectos.
En comparación con la encuesta que se hizo el mayo de este año, la inseguridad en las calles es el problema que más creció, pues pasó del 44% al 52%. Igualmente, la falta de empleo afecta más a los jóvenes de niveles socioeconómicos bajo y medio.
Las emociones de los jóvenes colombianos hoy
Llama la atención que el 53% de los 2517 jóvenes encuestados manifestó que la alegría es la emoción que más los embarga, a diferencia de mayo pasado cuando solo el 5% afirmó sentirse así. Esta tendencia fue generalizada en las regiones analizadas. Igual comportamiento tuvo la sorpresa, que pasó del 7% al 53%, especialmente en Antioquia y en la Costa.
El miedo continuó creciendo entre los jóvenes: mientras en mayo el 25% dijo sentir esta emoción, en noviembre así lo afirmaron el 31% de los encuestados. Aunque, la tristeza descendió, al pasar de 33% al 29% en el mismo período, esta emoción es la segunda que más predomina en Bogotá y en las zonas oriente, central y occidente del país.