Una marcha hacia la sede del Tribunal Supremo en Caracas, convocada por la oposición para expresar su respaldo a los 33 magistrados designados el viernes por el Parlamento, fue bloqueada hoy por los cuerpos de seguridad, lo que generó enfrentamientos entre manifestantes con policías y militares.
Los manifestantes pretendían llegar a la sede del Tribunal Supremo de Justicias (TSJ), sin embargo el paso fue impedido a pocos metros del punto de partida por la Guardia Nacional Bolivariana, que obligó a retroceder con bombas lacrimógenas a las personas que marchaban.
Los agentes se encontraron de frente en el municipio Chacao, un bastión de la oposición del este de Caracas, con un grupo de jóvenes conocido como “la resistencia”, que repelió los ataques con escudos caseros y atacó también a los uniformados con objetos contundentes.
El diputado opositor Miguel Pizarro denunció, en un vídeo colgado en las redes sociales, la “represión en Chacao” con “bombas lacrimógenas disparadas contra los manifestantes desde la autopista con unas tanquetas” que, dijo, les pusieron de frente.
El diputado Ángel Medina denunció en un mensaje en su cuenta en Twitter una “fuerte represión” en la autopista Francisco Fajardo, a la altura de Chacao.
“Nuestro pueblo en protesta pacífica atacado por la dictadura”, añade el mismo mensaje.
La oposición había anunciado su intención de llegar al Tribunal Supremo para expresar su respaldo a los 33 magistrados designados el viernes por el Parlamento, desconociendo a una treintena que fue designado en 2015 por un Legislativo de mayoría chavista.
Las marchas partieron desde varios puntos de Caracas aproximadamente a las 13.00 hora local (17.00 GMT) y la actividad fue replicada en ciudades como Barquisimeto y Maracaibo, en el interior del país, y Margarita, en el estado isleño de Nueva Esparta.
Venezuela vive desde el pasado 1 de abril una ola de protestas antigubernamentales que se desató al atribuirse el Tribunal Supremo las funciones del Legislativo, en unas sentencias después revocadas parcialmente que incluían la medida de despojar a los diputados de su inmunidad.
Al menos cien personas han muerto hasta ahora en episodios violentos relacionados con las manifestaciones, que han desembocado a menudo en enfrentamientos con las fuerzas del orden.