Desde finales del mes de septiembre, Bogotá retomó el esquema de racionamiento diario y cada diez días se repite el ciclo.
La Alcaldía de la capital advirtió en un comunicado que “los intensos aguaceros presentados en Bogotá durante la última semana contrastan con las pocas precipitaciones ocurridas en el sistema Chingaza”.
“De hecho, según los análisis de los técnicos de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) el nivel de los embalses cayó en un 0,35 % al terminar el ciclo”, agregó la información.
El alcalde de la ciudad, Carlos Fernando Galán, explicó el mes pasado que otra medida adoptada es la definición de un “día cero para Bogotá” si el nivel de la red de embalses que abastecen de agua a esta ciudad de más de ocho millones de habitantes no mejora en las próximas semanas, lo que llevará a endurecer aún más el racionamiento.
“El día cero se va alcanzar cuando el sistema de Chingaza llegue al 36 % (de su capacidad) que está actualmente en el 45,4 %. Si el nivel de Chingaza llega a ese punto tendremos que tomar medidas más restrictivas que las que estamos tomando hoy”, manifestó entonces el funcionario.
La meta de la Alcaldía de Bogotá era llegar a octubre con los embalses del sistema Chingaza en el 70 % de su capacidad, pero a la fecha están 26,6 puntos porcentuales por debajo del objetivo.
EFE