El papa hizo un llamado a los medios para vencer la “costumbre de desacreditar al adversario” y, en su lugar, afrontar un diálogo respetuoso.
El papa Francisco instó hoy a los medios de comunicación a que eviten “una comunicación hostil” para que no se alimente “el dramático contexto del conflicto global que estamos viviendo”, en el mensaje para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que se publicó hoy.
“En el dramático contexto del conflicto global que estamos viviendo, es urgente afirmar una comunicación no hostil. Es necesario vencer la costumbre de desacreditar rápidamente al adversario aplicándole epítetos humillantes, en lugar de afrontar un diálogo abierto y respetuoso”, aconseja el papa en este mensaje a los comunicadores que lleva el título de “Hablar con el corazón”.
El papa afirma que se necesitan “comunicadores dispuestos a dialogar, comprometidos a favorecer un desarme integral y que se esfuercen por desmantelar la psicosis bélica que se anida en nuestros corazones”.
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Destacó que “como hace sesenta años, vivimos una hora oscura en la que la humanidad teme una escalada bélica que se ha de frenar cuanto antes, también a nivel comunicativo”.
Y denunció que “uno se queda horrorizado al escuchar con qué facilidad se pronuncian palabras que claman por la destrucción de pueblos y territorios. Palabras que, desgraciadamente, se convierten a menudo en acciones bélicas de cruel violencia”.
Por ello llamó a los medios de comunicación “a rechazar toda retórica belicista”, así como “cualquier forma de propaganda que manipule la verdad, desfigurándola por razones ideológicas”.
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“Se debe promover, en cambio, en todos los niveles, una comunicación que ayude a crear las condiciones para resolver las controversias entre los pueblos”, agregó.
En otros consejos al mundo de la comunicación, Francisco pidió a los medios que no fomenten “el rencor que exaspera, genera rabia y lleva al enfrentamiento, sino que ayude a las personas a reflexionar con calma, a descifrar, con espíritu crítico y siempre respetuoso, la realidad en la que viven”.
A este propósito, el papa también criticó, como ocurre en las redes sociales, que “la comunicación frecuentemente se instrumentaliza, para que el mundo nos vea como querríamos ser y no como somos”.