El submarino ARA San Juan, desaparecido en Argentina el pasado miércoles con 44 tripulantes a bordo, sufrió una avería en una de sus baterías antes de perder el contacto en la madrugada de su desaparición, informó el capitán del sumergible Gabriel Galeazzi.
El operativo de búsqueda y rescate cuenta con 10 aviones y 13 barcos y la colaboración internacional de Chile, Brasil, Estados Unidos, Reino Unido, Colombia, Uruguay y Perú.
La Armada Argentina anunció que se trató de un “cortocircuito” en la batería, que inició el sistema, lo que obligó a “cambiar la derrota” y dirigirse directamente hacia Mar del Plata, lugar al que hubiera llegado este lunes en un viaje normal.
El capitán de navío Gabriel Galeazzi explicó a la prensa local que el miércoles de la desaparición del submarino, “el buque salió a superficie y de ahí comunicó esta avería que había tenido, por eso el Comando de la Fuerza de Submarinos, que era su control en tierra, le dice que cambie la derrota y que venga para Mar del Plata”.
También afirmó que las comunicaciones satelitales sobre las que había informado el ministerio de Defensa “no eran del submarino”, luego de hacer un “análisis detallado de todos las unidades que usan ese tipo de comunicación”.
La búsqueda, como sostuvo el portavoz de la Armada Argentina, Enrique Balbi, no se canceló por el temporal, a pesar de que éste está dificultando las labores de rastreo, y aseguró que la exploración aérea se realiza las 24 horas, informa Efe.
Balbi quiso aclarar que el submarino informó el miércoles que estaba navegando, por lo que la avería comunicada por el capitán previamente no había afectado a la salida de la nave.
“Más allá de cualquier avería que pudiera haber informado, una vez que está navegando hacia Mar del Plata, no hay que vincular”, dijo.
La avería era, según Balbi, un principio de avería eléctrico que afectaba la alimentación del submarino.