El Gobierno de Venezuela calificó de “irracional” las decisiones anunciadas por el gobierno de Estados Unidos en contra de funcionarios oficialistas venezolanos, y condena estas medidas “coercitivas unilaterales” que, afirma, coarta las relaciones de amistad entre naciones.
Según la Cancillería venezolana, “Venezuela rechaza categóricamente la irracional decisión del Gobierno de los Estados Unidos de América de catalogar una vez más al noble pueblo venezolano como una amenaza a su seguridad nacional, en esta ocasión bajo falsos supuestos de que plantean una amenaza terrorista y al orden público estadounidense”.
Así mismo, denuncia ante la comunidad internacional “las acciones inamistosas y hostiles” de Estados Unidos que, a su juicio, “buscan estigmatizar” con el “pretexto de la lucha contra el terrorismo, al incluirla en una lista elaborada unilateralmente y en la que se acusa a otros Estados de ser supuestos promotores de este terrible flagelo”.
El país caribeño considera que el país norteamericano viola los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, del derecho internacional y de las normas que deben regir las relaciones de amistad y cooperación entre los Estados.
Considera además que estas acciones son parte de una “campaña de agresiones sistemáticas” en su contra, y que pretenden justificar la lucha contra el terrorismo para “alcanzar objetivos políticos” “y ejercer presión sobre las instituciones del Estado venezolano”.
En ese sentido, la nación petrolera “repudia las conductas imperiales” de Estados Unidos “e informa que, con arreglo al principio de reciprocidad, considerará todas las medidas necesarias para defender el interés y la soberanía nacional”.